Concurso de anteproyectos para la Facultad de Ingeniero de Caminos. Universidad de La Coruña.

El edificio se implanta pensando en la futura relación con el resto del campus. Se proyecta un plano horizontal sobre el que se asientan tres prismas conformando una plaza, zócalo bajo el que se sitúan los laboratorios y que permite una comunicación interior entre las tres piezas (cuerpo docente, aula magna y cafetería). En el volumen dominante una galería constituye el lugar de comunicación y encuentro, donde las escaleras son las protagonistas del espacio (una escultura en una caja de cristal). Galería que se abre a la plaza buscando el diálogo exterior-interior. Se recupera el concepto clásico de ágora o foro, donde las relaciones tienen lugar tanto dentro como fuera de los edificios.